“Hoy pienso, ¿cuántas niñas están igual que mi hija, que por vergüenza no denuncian?, externó el padre de Antonia Barra
Antonia Barra, una joven chilena de 21 años de edad, se suicidó en octubre de 2019, casi un mes después de haber sido abusada sexualmente. Sin embargo, antes de quitarse la vida, dejó dos registros donde relató la violación.
Su caso estremeció a la sociedad de Chile, ya que el juez, Federico Gutiérrez, quien acreditó la agresión sexual, ordenó que el imputado, Martín Pradenas, de 28 años, permaneciera bajo arresto domiciliario y no en prisión preventiva.
El magistrado argumentó que no había pruebas suficientes que evidenciaran el delito y destacó la buena conducta del acusado, a pesar de que ya ha sido investigado por cinco casos de abuso sexual y violación de otras jóvenes.
Además, definió que dos de las cinco acusaciones, una ocurrida en 2010 a una joven de 16 años, y otra en 2016 a una joven de 19 años, están prescritas. En aquél país sudamericano, este tipo de delitos prescriben transcurridos cinco años.
Durante la audiencia judicial transmitida en vivo y que llegó a registrar un millón de conexiones, se difundió un video de Antonia y Martín, en el que se aprecia cómo él tira de ella mientras caminan.
“Al ver el video donde aparece el acusado junto a la víctima, que va a ser violada y que se va a quitar la vida, el juez dice: ‘yo solo veo a una pareja caminando’. Es una señal muy potente de cómo la justicia chilena no ve o elige no ver lo que ocurre en estos delitos”, dijo la periodista chilena, Paula Molina a BBC.
El presunto agresor sexual relató en un video publicado el 17 de julio en YouTube, que en las imágenes, que posteriormente se divulgaron en televisión nacional, “se puede ver cómo con Antonia nos damos besos, abrazamos y después nos vamos como personas normales”.
Cabe mencionar que Martín Pradenas confirmó que tuvieron relaciones sexuales, pero aseguró que fueron consensuadas.
El juicio comenzó el pasado 21 de julio y sobre el caso el juzgado estableció 120 días para la recopilación de evidencias e investigación de los hechos.
AHORA | Se realiza performance de #LasTesis #UnVioladorEnTuCamino en Quilicura. El violador eres tú #MartinPradenas. pic.twitter.com/7SywBkDg52
— primeralineaprensa (@primeralineapr) July 22, 2020
Por su parte, el padre de Antonia, Alejandro Barra, externó que seguirán adelante y lo importante es que el delito de su hija sea considerado y que el responsable sea juzgado como corresponde.
“La decisión de mi hija fue muy dolorosa para nosotros. Y nos dimos cuenta de que tenía que ver vergüenza, con el dolor”, manifestó Alejandro.
De acuerdo con Animal Político, Antonia había viajado a Pucón, al sur de Chile, junto con su amiga, Consuelo y su novio. La joven se había encontrado con Martín en una discoteca, donde comenzó el acoso de Pradenas, mismo que fue registrado en las cámaras de seguridad.
La mañana del 18 de septiembre de 2019, la joven despertó en una cabaña en dicha ciudad, Martín estaba sobre de ella y después de gritarle que se apartara, se vistió y se fue. Los hechos que siguieron fueron reconstruidos, entre otras pruebas, mediante audios que la joven dejó pidiendo ayuda a una de sus amigas.
También, se los envió a su exnovio, Rodrigo Canario, quien la insultó y además grabó la llamada y la reenvió. Un día después, ella mandó un mensaje de despedida y se suicidó.
El padre de la joven de 21 años comprendió las circunstancias que habían desencadenado el suicidio de su hija, luego de haber revisado su teléfono celular y conversar con sus amistades y escuchar los audios (que habían sido grabados sin el consentimiento de Antonia) que describían el abuso sexual.
“Hoy pienso: cuántas niñas están igual que mi hija, que, por vergüenza a la exposición, a que se les apunte, no denuncian. ¡A una niña hay que aplaudirla porque se atreve a denunciar a un delincuente! Eso es lo que yo quiero lograr. Porque a mi hija le faltó que yo y la sociedad completa le dijera: todo tiene solución”, dijo Antonio Barra.
La muerte de Antonia Barra ocurrió una semana antes de que miles de mujeres chilenas corearan una frase que en poco tiempo hizo eco en el mundo, “el violador eres tú”.
La intervención del colectivo feminista Las Tesis y su mensaje “y la culpa no era mía, no dónde estaba ni cómo vestía”, se interpretó por primera vez en los tribunales de justicia en Chile, los mismos que hoy deciden el destino del caso contra Martín Pradenas.
“Existe la percepción de que el acoso sexual a las mujeres es una cuestión muy generalizada en Chile”, señaló Molina sobre el caso de Antonia Barra.