Camila, como se hizo llamar la mujer de 36 años de edad, relató una historia de abusos
“Ser violada por dos hombres de esa iglesia es un trauma que jamás superaré”, expresó Camila, quien además está incapacitada para trabajar
Una mujer aseguró que fue víctima de abusos durante su paso por la Iglesia de La Luz del Mundo, en donde incluso la obligaron a casarse con el hombre que la violó.
Camila, como se hizo llamar la mujer de 36 años de edad, relató una historia de abusos que iniciaron en su infancia con su familia, en Fresno, California.
Tenía 11 años de edad cuando su familia ingresó en La Luz del Mundo, en donde bautizaron a su padre, a su madrastra, a su hermana y a ella, aunque unos años más tarde.
“Íbamos tres veces al día, yo no sabía por qué había que orarle tanto al Apóstol, las hermanas lloraban mucho, gritaban y era muy desagradable para mí”, recordó la mujer.
A las 4:30 de la mañana tenía que despertarse Camila para asistir a las misas “para darle gusto al Apóstol, porque eso es lo que Dios quiere”, le decían.
En ese entonces, el Apóstol de La Luz del Mundo era Samuel Joaquín García, el padre del actual líder, Naasón Joaquín García.
Pese a que en ese momento ella denunció las golpizas que su padre le propinaba, al Apostol “nunca le importó nada. Me decía que si yo no quería ir a la iglesia, mi padre tenía que disciplinarme porque está en la palabra de Dios. Así que me sentía muy sola”.
Ya en la adolescencia, Camila fue víctima de abuso sexual, primero por un miembro de esta Iglesia, a los 14 años y a los 16 años, por otro de estos integrantes.
En el segundo caso, el pastor de la iglesia se enteró y la obligó a casarse con su agresor para que Dios les perdonara por fornicar.
Camila no quería casarse con su violador pero el pastor insistió. “Y me acuerdo que hasta nos dijo que, si no nos casábamos, los hijos que tuviéramos se iban a condenar, iban a ir al infierno”, dijo.
La adolescente se caso en Reno, Nevada, Estados Unidos, donde los menores pueden contraer matrimonio con la aprobación de uno de sus padres y un juez.
Pero ni el matrimonio detuvo el maltrato, pues estos continuaron durante años. “Me ahorcaba cuando yo estaba embarazada, me forzaba a tener relaciones cuando yo no quería, decía que era una estúpida. Me destruyó completamente”, narró la mujer, quien prefirió callar para que su padre no la castigara más.
Años más tarde la mujer intento suicidarse, pero al fracasar en su intento huyo con sus hijos, contó en una entrevista para Telemundo.
Ahora, Camila decidió compartir su historia , pese a que su salud mental y emocional está muy afectada, pues toma varias pastillas al día para controlar el estrés postraumático que le diagnosticaron.
Por si fuera poco, los médicos que la tratan la incluyeron en una lista de monitoreo de personas en riesgo de suicidio, debido a las huellas psicológicas que estas agresiones dejaron en ella.
“Ser violada por dos hombres de esa iglesia es un trauma que jamás superaré”, expresó Camila, quien además está incapacita para trabajar.